Ojo con el maquillaje de Halloween

Ojo con el maquillaje de Halloween

Queda muy poco para la celebración de Halloween, es el momento de preparar disfraces, maquillaje y otros complementos, pero ¡atención! ten cuidado con tus ojos. Pestañas postizas, lentillas o el propio maquillaje pueden dañar tu salud ocular.

Para pasártelo fenomenal, sin poner en riesgo tus ojos, ten en cuenta los consejos que comentamos a continuación.

La higiene es fundamental, lávate las manos siempre antes de comenzar a aplicarte el maquillaje en la zona de los ojos y evita así cualquier posible infección ocular.

Revisa bien el maquillaje, determinados productos cambian su composición con el paso el tiempo y esto podría causarte alergia. 

Lo ideal siempre es utilizar cosméticos indicados para el área ocular.

Te recomendamos que, aunque optéis por un disfraz grupal, no compartas ni intercambies el maquillaje ya que podría perjudicar la salud visual del grupo. 

La mayoría de las infecciones y lesiones oculares son resultado de un uso inadecuado del maquillaje, más que por sus componentes, ya que una manipulación deficiente puede favorecer la proliferación de bacterias y hongos.

Asegúrate de que los complementos que vayas a utilizar cumplan con las normativas de seguridad y calidad. Complementos como las pestañas postizas podrían irritar una zona delicada de los ojos como son los párpados.

Las lentillas de colores no son la opción más recomendable porque se consideran productos sanitarios y su prescripción corresponde a un profesional de la visión, ya que éstas se deben adaptar de manera personalizada a cada paciente y al estado de su visión, además de ser necesario evaluar síntomas como la sequedad del ojo o características como el material utilizado para la fabricación de la lente.

Existen multitud de reacciones y alergias a este tipo de productos, y pueden provocar desde irritación, conjuntivitis o reacciones alérgicas, hasta pérdida de visión.

Si finalmente te decides por utilizar lentillas de colores y formas por primera vez te recomendamos:

  • Vigilar las horas en las que las llevarás puestas.
  • Llevar a cabo una estricta higiene mediante el lavado y secado de manos antes de manipularlas.
  • Mirar primero hacia abajo, y luego parpadear varias veces hasta que se ajusten.
  • Aclarar con el gel adecuado y retirar en caso de notar molestias o estar incómod@.
  • Acudir previamente a una óptica para ajustar las medidas y saber si se es alérgic@ o se puedan llevar las lentillas elegidas.